Vivimos tiempos complicados. Muchas personas sufren falta de ánimo y es más fácil desmotivarnos. Actualmente, para sobrellevar las preocupaciones y evitar amargarnos, es fundamental potenciar nuestra actitud positiva. Caer en la negatividad es sencillo cuando nos envuelve un ambiente de desasosiego.

Pero, es precisamente en estos momentos, cuando el optimismo cobra más importancia. Enfocar nuestra mente de forma positiva, nos ayudará a enfrentarnos al día a día con más fuerza. Con la actitud adecuada, podremos sentirnos más felices y en disposición de superar los obstáculos de la vida. Mantener la esperanza y el optimismo, son dos herramientas indispensables para escapar de la ansiedad, el estrés y la depresión.

En muchas ocasiones, las situaciones tensas, acaban afectando a nuestro humor y a su vez, esto influye en nuestra relación con los demás. Frente a los altibajos, todo el mundo puede usar recursos que ayuden a mejorar nuestra actitud. A continuación, compartimos algunos consejos que podrían ayudarte a favorecer tu positividad y mejorar tu energía.

• Conócete: Trabajando tu inteligencia emocional, podrás estudiarte en profundidad y entenderte mejor. Es importante aprender a ser conscientes de nuestros propios sentimientos, así como de los ajenos. Siempre es buen momento para dedicarnos un poco de tiempo. De esta manera, lograrás localizar aquello que te inquieta más y trabajar en ello.
• Sé realista: Porque solemos relacionar el optimista con el soñador, y no tiene por qué ser así. Una actitud positiva no consiste en ignorar la realidad y crearnos una ficticia. Al contrario, se basa en entender la realidad y tratar de ver las partes positivas, comprender que lo malo nunca dura eternamente. Siendo realistas y conscientes, centrándonos en lo que podemos controlar y lo que no. Hay muchas cosas en el mundo que no nos gustan, pero, es probable que no esté en nuestra mano cambiarlas. Sin embargo, podemos mejorar en nosotros mismos y en nuestra vida infinidad de cosas.
• Motívate: Enfócate en metas y objetivos accesibles, confía en ti, aprende a ser constante y a premiarte por tus pequeños logros. Existen muchos recursos para lograr la motivación, que pueden ayudarte. Cuando estamos motivados, nuestra actitud tiende a mejorar.
• Sonríe: Muchos estudios señalan la importancia de la sonrisa. Incluso cuando es fingida, tiene un impacto positivo en nuestro cerebro. Si necesitas un poco de apoyo, te dejamos en el link, unos consejos para fomentar tu buen humor. Aunque, uno muy sencillo, es empezar por relativizar e intentar no tomarnos tan en serio.

• Evita la negatividad: Intenta alejarte de aquello que te genera malestar. Algunos días, ver demasiado las noticias puede provocarnos un bajón. En otros casos, son personas o situaciones que nos arrastran en su ola negativa. Trata de evitar estos estímulos nocivos y de sacar los pensamientos negativos de tu mente.
• Mejora tu alimentación: Porque con una dieta equilibrada el cuerpo está sano y te sentirás mejor. Además, existen algunos alimentos que pueden ayudarte a sonreír un poco más por sus cualidades. Algunos ejemplos de “alimentos felices” son las nueces y almendras, el chocolate negro, los plátanos, los pimientos picantes y, por supuesto, el azafrán. No es una especia que usemos a diario en la cocina, pero siempre puedes completar tu dieta con complementos alimenticios que te aporten aquello que necesitas.

Esperamos que estos consejos te ayuden a mejorar tu actitud, o, al menos, que te hayan sacado una sonrisa.